LITERATURA INFANTIL. ANÁLISIS Y SELECCIÓN.
Estamos hartos de escuchar el gran fracaso que hay entre los niños en cuanto a la lectura. Todo el mundo lo sabe, pero son escasos los profesores que ponen remedio a este gran problema.
Todavía los niños siguen pensando que la lectura es algo aburrido, una tarea obligada por el profesor, y no se dan cuenta de que es hermosa y que de ella hay cosas maravillosas que podemos aprender.
Leamos a los niños cuentos, dejémosles que elijan ellos mismos el libro que desean leer, guiémosles por el increíble mundo de la lectura.
Cuando seamos maestros, debemos conocer muy bien a nuestros alumnos y saber sus intereses para poder mandarles un libro de lectura que les pueda gustar. También es verdad que es muy difícil que el libro que les mandes le guste a todos los niños, porque siempre tendrás a algún alumno que no le guste.
Podemos utilizar muchísimos cuentos en el aula, como por ejemplo, para solucionar algún problema que haya ocurrido entre compañeros, pero también se pueden utilizar cuentos infantiles con los adultos para que los padres se den cuenta de cómo piensan los niños, cómo pueden comportarse en diferentes situaciones, etc.
En el Centro donde realicé mis prácticas, aprendí muchísimo de una profesora de cuarto de primaria. Ella me dijo que siempre que había algún problema en la clase, leía un cuento a sus alumnos relacionado con lo ocurrido allí y, ellos mismos se daban cuenta de por qué lo había leído. Un día, la profesora me invitó a estar una sesión en su clase porque había tenido un problema un niño de su clase con otro alumno de otra clase. Reunió a los dos niños y les contó un cuento titulado “Orejas de mariposa” todos los días a ese niño le insultaban con lo mismo, hasta que un día se lo contó a la profesora y ésta decidió intervenir. Después de haberle contado el cuento, sin decirle nadie nada, el niño que le había insultado le pidió perdón y le dio un abrazo. A mi me sorprendió muchísimo cómo el cuento le había llegado a su corazón.
También me comentó que en todas sus tutorías empezaba leyéndole un cuento a los padres porque en muchas ocasiones se sentían identificados y encontraban soluciones a muchos problemas que tenían con sus hijos.
Me gustaría añadir que en el colegio daban una tremenda importancia a la lectura, todos los niños leían en su casa el libro que les apeteciese y en el colegio uno que había analizado muy bien el profesor antes de decírselo a los niños, porque antes de recomendar una lectura debes analizarla, asegurarte para qué edad es, conocer bien a tus alumnos e interesarte por sus gustos, debes ver si el libro tiene buenas ilustraciones y están relacionadas con el cuento, si el tamaño de la letra es el adecuado, etc.
Después de haber contado todo esto, me gustaría introducir el concepto de texto literario.
¿Qué es un texto literario?
Un texto literario es aquel que cumple las siguientes características:
· 1ª Característica
Tiene que pertenecer a uno de los tres géneros literarios. Puede ser narrativo en prosa o narrativo en verso (Romances Mio Cid).
· 2ª Característica
Tiene que hacer uso explícito de la función poética del lenguaje. Incluye el simbolismo de las palabras. Quiero que extraiga sensaciones de las palabras.
Con el uso de las figuras literarias hace que el lenguaje exprese más de lo que se espera.
La función poética es lo contrario a la función informativa.
· 3ª Característica
Los textos literarios han de ser obligatoriamente de ficción (la ficción no es realidad). Es una realidad filtrada por medio de la subjetividad.
· 4ª Característica
La principal intención del texto y del autor es la intención artística.
La literatura es una arte creado con palabras
Después de haber contado todo esto, debemos tener muy claro los siguientes conceptos: literatura culta, literatura popular y literatura folclórica.
La literatura está dividida en dos grupos:
- Literatura culta: que siempre se ha escrito.
- Literatura popular: durante siglos no se ha escrito, ha pasado de “boca en boca” y en un momento determinado se escribe. No tiene autor.
No toda la literatura tiene autor, como por ejemplo los cuentos folclóricos (Caperucita sería un ejemplo) que eran historias contadas hasta que un día se escribieron.
La literatura folclórica NO TIENE AUTOR Y NO ES INFANTIL, por eso la literatura de autor es igual a la literatura infantil.
La literatura infantil son aquellos textos literarios que están creados (pueden ser contados y no escritos) para los niños entre cero y catorce años, cuyo objetivo principal es acercar a los niños a una experiencia artístico literaria.
Antiguamente, decían que literatura infantil eran los libros destinados a los niños.
En la Edad Media ya se escribían libros para un público infantil.
No todos aprendían a leer y a escribir, solo los privilegiados, nobles y clero (niños muy poco y niñas ninguna).
No me parece correcto que en los tiempos en los que estamos, todavía en las aulas no se sepa apreciar el gusto por la lectura, y lo más preocupante es que si preguntas a muchos profesores sobre los conceptos que hemos explicado anteriormente, no sabrían decírtelo correctamente. Por eso me parece indignante lo que ocurre en los colegios. Espero que con el paso del tiempo y con las nuevas generaciones, todas estas carencias se vayan solucionando.
El tiempo que estuve en el colegio realizando mis prácticas, pude observar cómo se trabajaba la lectura en el Centro. La verdad es que hacían mucho hincapié en ella, pero pienso que no se realizaba de la mejor manera posible.
Los niños leían media hora todos los días en voz alta, luego realizaban unas actividades únicamente relacionadas con la lectura. No aparecían actividades en las que ellos pudiesen expresar sus pensamientos, ni donde ellos pudiesen decir si alguna vez les había pasado algo parecido, pero eso no es lo peor, el profesor tampoco les preguntaba nada fuera de las actividades que marcase el libro.
Otra día tuvieron que realizar un examen de lectura, lo que tenían que hacer los alumnos era leer una historia que les daba el profesor, lo leían las veces que fuesen necesarias. Una vez que los niños pensasen que ya se habían enterado perfectamente de la historia, el profesor recogía su folio con el cuento y, después, debían contestar a las preguntas relacionadas con la lectura, pero estaban colocadas como si fuese un test y debían elegir la respuesta correcta. Las preguntas eran únicamente para memorizar. Pienso que la lectura no es una actividad de memoria, para eso hay otras tantas actividades que debemos utilizar para ello. Me llamó muchísimo la atención porque los niños no disfrutaban de la lectura, solamente pensaban en captar todos los detalles posibles para acertar a las preguntas del test. Una vez que terminasen la actividad, debían mirar a la pizarra digital que tenía un cronómetro y debían apuntar el tiempo que habían tardado en leer el cuento y en hacer las actividades.
También debo decir que me gustó muchísimo la biblioteca de aula porque en ella tenían muchos libros, podían coger el que ellos quisieran, pero si empezaban a leer el libro y no les entusiasmaba podían cambiarlo por otro. Me parece muy importante que no se obligue a los niños a leer un libro que no les gusta. No nos tiene que encantar todo lo que leemos ni todo lo que vemos, por eso me parece una manera de motivar al alumno a la lectura, porque un problema que tienen los colegios es que hacen que los niños piensen que la lectura es una tarea más, como pueden ser los ejercicios de matemáticas, y no se preocupan de que los niños disfruten de ella más que si fuese una película.
Quiero recordar a los maestros que también existe la poesía y se puede trabajar en las aulas, ya que apenas se utiliza y los niños cuando leen una, piensan que es un aburrimiento y no aprecian la belleza de éstas porque no están acostumbrados a trabajarlas. Además podemos trabajar la poesía con los niños gracias a Gloria Fuertes, esta estupenda mujer que cambió la literatura infantil y analizó lo que leían los pequeños, los niños pueden sacar toda su imaginación y su creatividad con poemas como “¿Cómo se dibuja un paisaje?” se puede trabajar en el aula, y cada niño puede realizar su dibujo a través de lo que dice la poesía.
Quiero recordar a los maestros que también existe la poesía y se puede trabajar en las aulas, ya que apenas se utiliza y los niños cuando leen una, piensan que es un aburrimiento y no aprecian la belleza de éstas porque no están acostumbrados a trabajarlas. Además podemos trabajar la poesía con los niños gracias a Gloria Fuertes, esta estupenda mujer que cambió la literatura infantil y analizó lo que leían los pequeños, los niños pueden sacar toda su imaginación y su creatividad con poemas como “¿Cómo se dibuja un paisaje?” se puede trabajar en el aula, y cada niño puede realizar su dibujo a través de lo que dice la poesía.
Aquí os dejo un enlace para que disfrutéis del maravilloso mundo de la poesía infantil gracias a Gloria Fuertes.
Además, tenemos los textos dramáticos, los cuales tienen entradas de personajes, para niños menores de ocho años no existen libros de teatro porque no los entienden debido a su comprensión lectora y si se los vas a leer es también muy complicado.
No podemos olvidarnos de los textos paraliterarios que tanto se utilizan en la escuela.
Podemos destacar dos fabulistas españoles, Iriarte y Samaniego, que dividen a las fábulas en dos:
- Fabulas morales: creadas porque les pidió el seminario de nobles textos para niños, mayores,...
(Samaniego)
" En un panal de rica miel..."
- Fábulas literarias: empezó el interés por acercar la literatura a los niños. Algunos autores recopilaban lecturas, les añadían una moraleja y los destinaban a los niños.
Aquí os dejo un enlace para que podáis conocer el mundo de las fábulas literarias de la mano de Iriarte.
Me gustaría mencionar al editor Saturnino Calleja, el cuál heredó una editorial de su padre.
Creó un apartado de literatura infantil. Calleja no escribía los libros, tan solo los editaba. Todos estos libros debían tener intención moralizadora o didáctica.
Coloma y Calleja idearon la mejor forma de acercarse a los niños. Los protagonistas eran niños, así éstos se identificaban con los personajes.
También debemos revalorizar el teatro y la poesía como texto.
Existen narraciones en las que los protagonistas son los niños, pero son personajes planos, a esto le llamamos paraliteratura.
Como por ejemplo, "Celia", "Antoñita la fantástica"
Después de todo lo que hemos hablado anteriormente, tengo muy claro que a la hora de mandar un libro a mis alumnos debo tener muy en cuenta los diferentes aspectos que he citado anteriormente, y sobre todo, y muy importante, el momento evolutivo en el que está el niño porque no tienen la misma capacidad ni los mismos intereses. No entiende igual un libro un niño de once años que un niño de ocho, por eso a la hora de mandar un libro en el aula este aspecto es fundamental, y hay que tenerlo muy en cuenta.
http://eoepsabi.educa.aragon.es/descargas/H_Recursos/h_1_Psicol_Educacion/h_1.5.Psicol_evolurtiva/01.Psicologia_Evolutiva.pdf
http://eoepsabi.educa.aragon.es/descargas/H_Recursos/h_1_Psicol_Educacion/h_1.5.Psicol_evolurtiva/01.Psicologia_Evolutiva.pdf
¡Hola!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho cómo has sabido relacionar los conceptos del bloque con tu experiencia en el aula de prácticas. Espero que en un futuro puedas cambiar todo aquello con lo que no estés de acuerdo.
Además, es muy importante, tal y como has hecho, apuntar que la literatura folclórica NO TIENE AUTOR Y NO ES INFANTIL.
Sigue así